La recién formada tormenta tropical “John” dejará este lunes lluvias torrenciales en el sur de México, donde tocaría tierra entre el martes y miércoles en el estado de Oaxaca, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
El centro del ciclón, el segundo de la temporada del Pacífico que pasaría sobre territorio mexicano, estaba en el último reporte a 200 kilómetros al sur de Punta Maldonado, estado de Guerrero, y a 250 kilómetros al oeste-suroeste de Puerto Ángel, Oaxaca.
El fenómeno presenta vientos sostenidos de 100 kilómetros por hora y rachas de 120 kilómetros por hora, con un desplazamiento hacia el nor-noreste a 6 kilómetros por hora.
La tormenta provocará lluvias extraordinarias, mayores a 250 milímetros en Oaxaca, y torrenciales, de 150 a 250 milímetros en Chiapas y Guerrero.
También habrá precipitaciones intensas en Veracruz, así como muy fuertes en Morelos y Puebla, y fuertes en el Estado de México.
Asimismo, el SMN pronosticó rachas de viento 70 a 90 kilómetros por hora y oleaje de 2 a 4 metros de altura en Oaxaca, y rachas de 40 a 60 kilómetros por hora con oleaje de 1 a 3 metros en Chiapas y Guerrero, con posible formación de trombas marinas.
“Se espera que las precipitaciones mencionadas sean con descargas eléctricas y posible caída de granizo, lo que podría generar deslaves, incremento en niveles de ríos y arroyos, así como desbordamientos e inundaciones en zonas de los estados mencionados”, advirtió el organismo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Por el paso del fenómeno, el SMN, en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, estableció una zona de prevención por efectos de huracán desde Punta Maldonado, Guerrero, hasta Bahías de Huatulco, Oaxaca.
“John” es el segundo ciclón de la temporada del Pacífico que tocaría tierra en México, donde la semana pasada azotó la tormenta “Ileana” en el estado de Sinaloa, en el noroeste del país, donde dejó daños menores.
Mientras que tres ciclones han azotado México por el Atlántico: el huracán “Beryl” y la tormenta “Chris“, que dejaron saldo blanco en julio, y la tormenta “Alberto” en junio, cuando dejó seis muertos en Nuevo León.
Las autoridades mexicanas pronosticaron en mayo hasta 41 ciclones con nombre en el océano Atlántico y el Pacífico, de los que al menos cinco golpearían el país, una cifra por encima del promedio en ambos casos.