Redacción
Al señalar que durante muchos años, Oaxaca se caracterizó por altos niveles de conflictividad social, con bloqueos carreteros, disputas agrarias, tomas de palacios municipales y retraso en proyectos estratégicos, el secretario de Gobierno, Jesús Romero López, dijo que actualmente, las cifras oficiales muestran una tendencia distinta, con una reducción de protestas y un fortalecimiento en materia de seguridad y gobernabilidad.
En conferencia de prensa, señaló que entre 2022 y 2024, la entidad fortaleció su estrategia de seguridad con resultados tangibles. El número de personas detenidas pasó de mil 646 en 2022, a más de 2 mil en los años siguientes. “Los vehículos asegurados aumentaron a 835 en 2024 y las armas decomisadas subieron de 245 a 421 en el mismo periodo”.

Informó que la incautación de droga creció de apenas 32 kilogramos en 2022 a 543 en 2024, mientras que el dinero recuperado alcanzó los 299.5 millones de pesos en este último año, una cifra sin precedente. También se incrementaron los operativos: de 17,899 en 2022 a más de 45 mil en 2024.
De acuerdo con datos establecidos en la Encuesta Nacional del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), dijo que los índices a la baja es el reflejo del trabajo realizado a nivel territorial, ya que la estrategia ya no se limita a reaccionar frente a delitos, sino a desarticular cadenas criminales mediante decomisos, presencia territorial e inteligencia operativa.
“Uno de los indicadores más visibles de la conflictividad en Oaxaca son los bloqueos carreteros. En 2022 se registraron 781, pero en 2024 la cifra se redujo a 436, lo que representa una disminución superior al 40%”.
Mencionó que las tomas de casetas de peaje también se redujeron drásticamente, de 67 en 2022 a solo 20 en los últimos dos años. “Estos avances, no responden al uso de la fuerza pública, sino a una política basada en miles de mesas de diálogo, monitoreo constante y mecanismos de conciliación temprana”.
Sobre la situación de los palacios municipales, Romero López destacó que en el pasado, decenas de ellos permanecieron tomados por tiempo indefinido, lo que paralizaba la vida institucional, sin embarg, hoy la mayoría han sido liberados.
“Uno de los hitos fue la recuperación del Zócalo de la ciudad de Oaxaca en 2022, tras 12 años de ocupación. También se liberaron espacios emblemáticos como el andador turístico y la explanada de Santo Domingo. Con ello, presidentes municipales volvieron a despachar en sus oficinas, los cabildos retomaron funciones y la ciudadanía recuperó el acceso a servicios básicos”.
Finalmente dijo que los resultados reflejan una transición real, ya que Oaxaca comienza a superar la “economía del bloqueo” para avanzar hacia una cultura de mediación y construcción de consensos. “La liberación de espacios públicos y el descenso de conflictos no solo significan orden institucional, sino también la recuperación de la confianza ciudadana”, subrayó.