
Redacción
Por no haber investigado la supuesta tortura de la que habría sido víctima durante su detención en 1994, tras el asesinato de Luis Donaldo Colosio, excandidato a la Presidencia de la República por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el juez segundo de Distrito de Amparo en Materia Penal, Antonio González García, otorgó un amparo a favor de Mario Aburto Martínez.
Dicho beneficio fue otorgado luego de Aburto Martínez, acusara de omisión a la Fiscalía General de la República (FGR). Señaló que en su procedimiento existieron actos de tortura, tratos, penas crueles, inhumanos y degradantes, así como delitos vinculados cometidos en su perjuicio por parte de la Fiscalía.
Ante ello, exigió que su nombre sea inscrito al Registro Nacional del Delito de Tortura, además señaló que, en su caso, la Fiscalía no ha cumplido con las obligaciones generales en materia de combate a la tortura derivado de los tratados internacionales que ha firmado y ratificado México.
El pasado 10 de febrero, cuando trascendió que la FGR habría reabierto el caso, se solicitó la declaración de los abogados Xavier Alfonso Carvajal Machado y Marco Antonio Mackliz Mercado, quienes fueron parte de la defensa del imputado durante las investigaciones que se realizaron tras el magnicidio.
De acuerdo a lo que ellos mismos explicaron en medios de comunicación, se habría citado a cuatro supuestos testigos más; sin embargo, revelaron que las preguntas habrían estado inclinadas a conocer información sobre Manlio Fabio Beltrones y el jefe de escoltas de Colosio Murrieta.
“Es un citatorio que se encuentra dentro de una investigación previa que fue formulada en contra de Mario Aburto Martínez el 23 de marzo de 1994 con motivo del asesinato de Colosio, pero no me explico por qué se trata de esta averiguación previa que están reabriendo y no una nueva investigación”, comentó en el espacio el litigante Carbajal Machado.
En dicho espacio, los abogados apuntaron que, debido a la forma en la que estaban siendo formuladas las preguntas, ellos creen que podría tratarse de una distracción fabricada por el gobierno, “con el ánimo de buscar cómo encontrar responsables de gobiernos anteriores, quieren involucrar personas que hayan incidido en el caso.
“Querían sacar información no precisamente sobre lo que atañe que es la supuesta tortura que sufrió Mario Aburto, sino de pretender buscar algo más de carácter político y sacar a flote alguna responsabilidad en algunos funcionarios”, dio a conocer la periodista Laura Sánchez como parte de una declaración de un supuesto testigo.
Finalmente, Mackliz Mercado apuntó que el asesinato de Colosio “ya es un caso cerrado”, debido a que se argumentó que existían los elementos suficientes para declararlo así.