Tras un año de trabajos de restauración y limpieza del Panteón General San Miguel, se reaperturó este espacio que es un emblema y patrimonio cultural de la capital oaxaqueña, con una inversión de más de 32 millones de pesos.
La importancia de la rehabilitación del camposanto recae en todo el contenido histórico que posee, pues ha sido testigo de las tradiciones del pueblo oaxaqueño y representa un lugar de respeto y reconocimiento donde yacen familiares y seres queridos de la población.
El apoyo de los Institutos Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de Patrimonio Cultural del Estado de Oaxaca (Inpac), fue de vital importancia pues se restauraron y sustituyeron los corredores norte, sur, este y oeste, las arcadas que tenían grietas, así como las cuarteaduras de los muros y liberación del enladrillado en la zona de criptas.
El titular del Inpac, Fernando Molina Herbert dijo que esta rehabilitación representó diversos retos que se superaron satisfactoriamente, gracias a los esfuerzos conjuntos del Gobierno del Estado, INAH y la ciudadanía en conjunto.