Determinante y letal, Lionel Messi alcanzó los 600 goles con el Barcelona al anotar dos veces ayer para cargar al club catalán a una victo-ria de 3-0 ante Liverpool en el partido de ida de su semifinal de la Liga de Campeones.

Luis Suárez abrió la cuenta contra su ex club a los 26 minutos. Pero Liverpool desperdició un puñado de inmejorables ocasiones para nivelar durante un tramo al comienzo del segundo tiempo en el que dominó con autoridad.

Después llegó el turno de Messi para asfixiar el ímpetu de una remontada por los visitantes ingleses. El astro argentino se encargó de aumentar la ventaja al aprovechar un rebote a 15 minutos del final y luego definió magistralmente de tiro libre –clavando el balón al ángulo – para su tanto 600 con la camiseta del Barça.

Liverpool se floreó durante largos pasajes del encuentro pero no supo jalar el gatillo cuando tuvo a los anfitriones contra las cuerdas, especialmente tras el descanso. Mohamed Salah rozó un valioso gol de visitante para Liverpool cerca del final cuando estrelló un remate en el poste.

Por momentos, Gerard Piqué y Clément Lenglet sufrieron para detener a Sadio Mané y Mohamed Salah, que daban sensación de peligro cada vez que se metían en el área.

El Barça penaba para conectar con Messi, pero la lesión de Naby Keita, sustituido por Jordan Henderson (al 24), obligó a Jürgen Klopp a mover piezas y con Henderson en la derecha, Jordi Alba empezó a llegar más.

Tras la modificación de Klopp, se abrió la oportunidad para el Barcelona. El lateral metió un balón al área chica donde apareció Suárez para desviar lo justo para meter el balón en la portería rival. El uruguayo celebró su primer gol de la temporada en Champions, competición en la no había vuelto a marcar desde hace más de un año, cuando anotó en los cuartos de final contra la Roma el 4 de abril de 2018.

Después del descanso, el Liverpool mantuvo su intensidad, jugando muy arriba y presionando la salida del Barça. James Milner dio el primer susto con un disparo cruzado que el portero Marc André Ter Stegen envió a córner. El portero del Barcelona se convirtió en la segunda parte en el salvador de su equipo, sacando varios disparos comprometidos.

El alemán volvió a meter una mano providencial a un disparo cruzado de Salah (53), que fue uno de los mejores de su equipo buscando el gol y generando asistencias. Le costaba salir al Barça, que veía como todo el juego se desarrollaba en su campo. Pero cuando peor lo estaba pasando el equipo azulgrana, apareció Messi para hacer levantar al Camp Nou.

Luis Suárez mandó un disparo al larguero, pero el rechace lo recogió el astro argentino para hacer el 2-0.

El tanto impulsó al Barça, que poco después veía como Messi repetía con un gol por falta directa al 82 para hacer el 3-0 y afianzarse como máximo goleador de la Liga de Campeones esta temporada con 12 tantos.

Con el 3-0 en contra, el Liverpool no bajó los brazos y Salah estrellaba un balón en el poste, después que Ivan Rakitic sacara de debajo de los palos un disparo rival (84).

El Barça aguantó y aún tuvo la posibilidad de un cuarto tanto, en una última contra sobre la campana pero Ousmane Dembélé sólo ante la portería mandó el balón a las manos de Alisson.

Entró espectacular, la busqué y tuve la suerte de que entrara por ahí, señaló Messi al final del partido sobre su espectacular gol.

Los dirigidos por Ernesto Valverde intentan repetir el triplete de títulos que logró en 2009 con Pep Guardiola y en 2015 bajo el mando de Luis Enrique. Sentenció el título de la Liga de España el pasado fin de semana y enfrentará al Valencia en la final de la Copa del Rey el 25 de mayo.

Liverpool intenta repetir en la final de la Champions tras perder 3-1 ante el Real Madrid en la edición del año pasado. El duelo de vuleta se jugará en Anfield el próximo martes.

Fuente: La Jornada