Ya pasó la euforia de las fiestas de la Guelaguetza, todo mundo hace cuentas alegres, todos dirán que fue exitosa como nunca, que la cantina gigantesca instalada en el Paseo Juárez “El Llano”, fue más visitada que años anteriores, que la derrama económica rebasó las expectativas, que los miles de visitantes que llegaron a Oaxaca se fueron con las ganas de regresar y se dirán muchas cosas bonitas y está bien.
Sin embargo ha llegado la hora de hacer cuentas, ha llegado el momento de hacer ajustes en el gabinete de Alejandro Murat, ha llegado el momento de hacer a un lado a quienes no están funcionando, la nueva realidad política del estado así lo amerita, el ejecutivo estatal tiene que seguir adelante, solo que ahora ya no tiene compromisos con nadie y mucho menos con tanta organización social que lo único que piden es dinero.
Cuando digo que Alejandro Murat ya no tiene compromisos con nadie, es porque todo gobernante llega al poder haciendo alianzas con todos, pidiéndole a todos los grupos sociales que lo ayuden, y todos prometen hacerlo, eso mismo pasó en el reciente proceso electoral, todos los grupos políticos de izquierda, centro y derecha, en muchas ocasiones se acercaron al ejecutivo estatal a solicitar apoyos diversos y juraron apoyar a los candidatos del PRI en la pasada elección.
Sin embargo los resultados del histórico proceso electoral demuestran que nadie cumplió sus promesas, que todos recibieron apoyos y absolutamente nadie cumplió, ni los grupos sociales que decían pertenecer al PRI, ni los aliados de la supuesta izquierda, ni los mismos funcionarios, amigos y aliados del ejecutivo, todos o por lo menos la gran mayoría voto por Morena, es decir dejaron solo al gobernador, le mintieron y eso hasta cierto punto es bueno y saludable, les digo por qué.
Todo gobierno siempre tiene que estar dándole apoyos múltiples, dinero, y hacerle muchos favores a los grupos de izquierda, y a sus diversas organizaciones sociales, principalmente a sus dirigentes y de esta manera los grupos que dicen representar están tranquilos, en esta ocasión, todos comprometieron su voto a favor de los candidatos del PRI y al ganar Morena, demuestran que no cumplieron su compromiso, lo que deja al gobernador completamente libre de todo compromiso, eso le permitirá gobernar los cuatro años que le quedan con absoluta libertad.
Libre de compromisos con medio mundo, Alejandro Murat solo tiene que hacer algunos cambios, algunos enroques entre los integrantes de su equipo de trabajo, mandar a descansar a los que están de adorno, llamar a quienes tienen ganas de trabajar y seguir adelante, el estado no se puede detener, hay mucha obra por todo Oaxaca, hay muchos planes y habrá mucho apoyo presidencial para nuestra entidad, pues el hasta hoy presidente virtual Andrés Manuel López Obrador, va enviar recursos a todo el sur del país y ahí esta nuestra entidad lista para seguir adelante…..Búsqueme en tuiter en @visionpolitica7.
