La Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés) de Estados Unidos elaboró una lista de más de dos docenas de espías rusos que presuntamente fingen ser diplomáticos en México con el objetivo de solicitar a autoridades mexicanas que los expulsaran de sus embajadas, informó hoy The New York Times.
En esta lista, reporta el Times, aparecen los nombres de algunos de los 100 agentes de inteligencia que durante este año fueron expulsados de Estados Unidos y Europa, que posteriormente fueron reubicados en México.
De acuerdo con el artículo firmado por Maria Abi-Habib, desde el sexenio pasado, cuando era presidente Andrés Manuel López Obrador, diplomáticos estadounidenses han buscado llamar la atención de funcionarios de Relaciones Exteriores mexicanos sobre esta lista, sin éxito.
“Desde 2022, funcionarios estadounidenses han expresado su preocupación por los espías rusos al presidente de México, al canciller y a otros ‘en múltiples ocasiones’, afirmó el señor González, exfuncionario de la administración Biden. Otro funcionario estadounidense indicó que se plantearon las mismas preocupaciones al gobierno de la actual presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien asumió el cargo el otoño pasado”, informa el artículo.
De acuerdo con fuentes consultadas para la elaboración del artículo, las autoridades diplomáticas habrían, de manera consistente, desestimado los señalamientos de los estadounidenses, ya fuera declarando que ignoran conocer información sobre el tema o que el documento fue extraviado y por lo tanto no fue posible darle seguimiento.
Ejemplo de esto sería cuando, en marzo de 2022, el entonces presidente López Obrador negó tener información sobre la afirmación de un general estadounidense que afirmó públicamente que México es una especie de refugio para espías rusos.
Esto sería preocupante para el gobierno estadounidense que, en el marco de la resurrección de la Doctrina Monroe, busca desterrar la influencia de potencias de ultramar en el continente.
La cercanía de México con Estados Unidos también es un factor preocupante para el país norteamericano, ya que permitiría realizar operaciones de inteligencia ante la gran afluencia turística que hay, por ejemplo, en playas como Cancún.





































