El congreso local entregó este martes la medalla Rosario Castellanos a la escritora y dramaturga tzotzil, Petrona de la Cruz, por su aportación literaria y teatral a favor de las luchas de los pueblos originarios y la defensa de los derechos de las mujeres y los niños.
El reconocimiento le fue impuesto por el gobernador Rutilio Escandón Cardenas, durante una sesión solemne de la legislatura local.
La presea que lleva el nombre de la escritora comiteca es la mayor distinción que otorga el gobierno de Chiapas a mujeres y hombres del país que con su trabajo contribuyen a la ciencia, al arte o por sus virtudes en grado eminente.
De la Cruz, quien en 1992 obtuvo el premio Rosario Castellanos de literatura, que otorga el gobierno de Chiapas, nació en 1965 en Zincacatán, situado en Los Altos de Chiapas, pero desde joven emigró a San Cristóbal de Las Casas, donde realizó trabajos domésticos para mantenerse y continuar con sus estudios.
La diputada Rosa Elizabeth Bonilla, presidenta de la comisión para la postulación de la medalla comentó que Petrona incursionó como actriz de teatro en 1989 y dos años después participó en un encuentro de dramaturgos en Toronto, Canadá.
Una mujer desesperada, se titula la primera obra de la indígena, que aborda la violencia en contra de las mujeres.
Al tomar la palabra, la escritora y dramaturga se manifestó por la defensa y la lucha por la igualdad y equidad entre hombres y mujeres.”Todos somos iguales, seamos rojos, amarillos, blancos o mestizos, pues la sangre siempre es roja”.
Dedicó el galardón a las mujeres, ancianos y pueblos originarios, al tiempo que pidió a los gobernantes y legisladores que actúen con honestidad, humildad y sabiduría.
La medalla la han recibido entre otros, Rubén Bonifaz Nuño, Carlos Monsiváis, Elena Poniatowska, Guadalupe Loaeza, Ángeles Mastretta, Beatríz Paredes, Enoch Cancino Casahonda y Óscar Oliva.
Fuente: Excélsior
