El Historiador y Promotor Cultural, Director en diversos periodos de la Casa de la Cultura Juchiteca, Vidal Ramírez, confirmó la suspensión de Velas Istmeñas este 2018 en Juchitán, debido a que aún vive su duelo, a causa de las afectaciones y siniestros que dejaron los sismos del pasado mes de septiembre del 2017, principalmente porque no hay las condiciones para su realización.
Y es que de las tradicionales fiestas más esperadas del año por su significado y esplendor, reflejo de las genuinas tradiciones del Istmo de Tehuantepec, son las velas Istmeñas, sin embargo este 2018, la vida se modificó y estas imponentes fiestas tradicionales anuales fueron suspendidas en Juchitan de Zaragoza, el Municipio más afectado por el terremoto del pasado 7 y 19 de septiembre del año pasado.
De acuerdo a Vidal, un año atrás, en la temporada de velas, los días eran de alborozo por las compras y preparativos, este 2018 el panorama cambió, casas derruidas y escombro apilado en medio de calles gruesas de polvo, necesidades muchas, y el inevitable temor ante cualquier sismo, por menor que sea, es lo que se vive hoy en Juchitán, que determino hace un par de meses, la cancelación este año de las mundialmente famosas Velas, confirmó el Promotor Cultural, Director en diversos periodos de la Casa de la Cultura Juchiteca.
Explicó que la vela San Vicente Ferrer, la más gloriosa de la región, no tendría razón este 2018, debido a que el templo en honor al Santo Patrón está devastado, las casas de varios mayordomos sufrieron daños o incluso pérdida total, mientras que el ánimo de la población está deteriorado.
El daño sufrido en este municipio y pueblos hermanos implica un gran duelo, el luto de un año es necesario consideró el historiador de Juchitán, “no puede haber derroche de alegría cuando están aún en espera de la reconstrucción de su tierra”, apuntó.
De acuerdo a Vidal, no siquiera capacidad hotelera para recibir a los visitantes. “No hay las condiciones respecto a servicios para recibir a los visitantes, las calles principales de Juchitán donde pasan cada año los convites, los carros alegóricos emblemáticos de las fiestas, están ocupadas, sucias y deterioradas.
Así, la determinación de cancelar las velas de mayo en Juchitan fue tomada por la sociedad de mayordomos desde febrero aproximadamente.
NO obstante, el promotor cultural, afirmó que los Juchitecos, no están caídos, pero si de duelo, por la grave pérdida del pueblo entero.
El investigador zapoteco Víctor de la Cruz, en su libro La religión de los binnigulasa, establece que las velas tienen un origen sagrado y prehispánico, cita al escritor oaxaqueño Manuel Martínez Gracida, que enmarca el origen de las velas hacía finales del siglo XIX, año 1900 aproximadamente.
Hoy, a más de 1 siglo, se confirmó la suspensión de Velas Istmeñas en Juchitán, debido a que aún vive su duelo, a causa de las afectaciones y siniestros que dejaron los sismos del pasado mes de septiembre del 2017, principalmente porque no hay las condiciones para su realización.
Fuente: El Piñero