EFE.- Los dispositivos de seguridad del Museo del Louvre “no fallaron” sino que “funcionaron”, dijo este martes la ministra francesa de Cultura, Rachida Dati, en respuesta a las críticas que ha recibido por el robo de joyas del pasado domingo.
También señaló que encargó una investigación administrativa que deberá detallar cómo operó la seguridad e insistió en que el refuerzo de los dispositivos se está llevando a cabo pero tarda por las normas administrativas.
“Lo que pasó el domingo, no es un banal incidente. Es un ataque grave a nuestro patrimonio histórico” y también “una herida para todos nosotros” porque el Louvre es “la pantalla de la cultura francesa y de nuestro patrimonio”, señaló Dati en una sesión de control al gobierno ante la Asamblea Nacional.
Sobre el hecho de que se conocieran los problemas potenciales de seguridad en el museo, la ministra reconoció que se habían recibido alertas desde hace “mucho tiempo, diría que demasiado tiempo“.
Pero añadió que por eso la directora del museo, Laurence des Cars, había encargado auditorías de seguridad en 2022, 2023 y 2024 que habían dado a una serie de recomendaciones que “se están poniendo en marcha”.
Entre las recomendaciones destacó la modernización de la videovigilancia, que no existe en todas las salas y que se está desplegando; la reestructuración de los centros de control de seguridad, y de las redes de fibra óptica y de informática, lo que supone instalar “kilómetros de cable”, cosa que se está haciendo, dijo.
La ministra señaló que eso toma tiempo por dos razones, porque las normas de un edificio patrimonial como es el Louvre imponen procedimientos complejos, pero también por las reglas de los concursos públicos, que necesitan meses de procedimientos antes de que puedan iniciarse las obras.
Sobre las responsabilidades potenciales, Dati afirmó que una vez que se tengan las conclusiones de las investigaciones, “si hay que tomar medidas se tomarán”.
La reapertura, este miércoles
Las puertas del Museo del Louvre se abrirán al público este miércoles, por primera vez desde el robo que se produjo el domingo por la mañana, pero la Galería de Apolo de la que los ladrones se llevaron las joyas de gran importancia histórica seguirá cerrada durante “un cierto tiempo”, indicó a EFE una portavoz de la institución.
El museo fue evacuado cuando se produjo el robo, y aunque el lunes todo estaba preparado para recibir visitantes, en el último momento sus responsables decidieron dar marcha atrás, y los martes son el día de cierre semanal. El Louvre es el museo más visitado del mundo; en 2024 recibió a 8.7 millones de personas.
Siete minutos de atraco
El robo se produjo el domingo a las 9.30 horas locales, poco después de que el museo hubiera abierto al público. Un comando de cuatro ladrones llegó al flanco sur del Louvre, que da al río Sena, con dos motos y un camión con un montacargas, del que se sirvieron para subir dos de ellos hasta la Galería de Apolo, en la primera planta.
Una vez en el balcón, abrieron un boquete con un disco de corte en el cristal de una de las puertas y se dirigieron a dos vitrinas que fracturaron con esa misma herramienta.
Se llevaron nueve joyas pero una de ellas, la corona de la emperatriz Eugenia de Montijo, la perdieron en su huida. Toda la operación duró únicamente siete minutos.
Decenas de investigadores están trabajando para tratar de dar con esos cuatro hombres y recuperar el botín, de un valor histórico y patrimonial “incalculable”, según la ministra.