La bolsa mexicana avanzó este martes, aunque se perfila a registrar su peor comportamiento anual desde 2018, en las primeras operaciones de una jornada que se anticipaba errática debido a ajustes de posiciones y un bajo volumen por el periodo vacacional de fin de año.
El índice líder S&P/BMV IPC, que agrupa a las acciones más negociadas del mercado doméstico, subía un 0.55% a 49 mil 108.64 puntos, después de dos sesiones consecutivas de pérdidas.
Aun así, sumaba un retroceso cercano a un 15% en todo el año, el peor desempeño entre una cesta de plazas bursátiles de referencia internacionales.
Por su parte, el peso mexicano se depreció este martes, encaminándose a registrar su peor desempeño anualdesde la crisis financiera de 2008, en el último día de negociaciones de un año marcado por las elecciones presidenciales de México y Estados Unidos.
Con una escasa liquidez debido al periodo vacacional, el peso cotizaba en 20.75 unidades, con un retroceso de un 0.55% frente al precio de referencia de LSEG del lunes, en su cuarta jornada consecutiva de pérdidas.
El peso, que inició el año como una de las divisas más sólidas frente al dólar, comenzó en junio un rápido deterioro tras la aplastante victoria oficialista en los comicios locales que dio pie a una serie de polémicas reformas, vistas por el mercado como una amenaza para el ambiente de negocios local.
El posterior triunfo electoral de Donald Trump en noviembre exacerbó las preocupaciones sobre el futuro de la segunda mayor economía de América Latina ante el temor de que sus políticas proteccionistas puedan poner en jaque el comercio con Estados Unidos, uno de los motores de la actividad productiva de México.
Así, el peso mexicano apunta a culminar el año con un retroceso acumulado de alrededor de un 22%, uno de los peores desempeños entre una cesta de divisas referenciales a nivel global, solo por detrás del real brasileño y el peso argentino.
Vía Latinus