Francia moviliza este fin de semana a 110 mil policías y gendarmes y 44 mil bomberos en un dispositivo de seguridad “de una amplitud excepcional”, ante las celebraciones de la Fiesta Nacional, el sábado, y de la final del Mundial, el domingo.
Más de 230 zonas de aficionados se prevén por todo el país para que cerca de un millón de espectadores pueda seguir en pantallas gigantes el partido entre Francia y Croacia, un número que puede aumentar dadas las solicitudes que están recibiendo las prefecturas, explicó el ministro del Interior, Gérard Collomb.
La mayor de estas zonas estará en el Campo de Marte de París, con capacidad para 90 mil espectadores protegidos por cuatro mil agentes, precisó Collomb, que dijo que se prevé un perímetro en el que se hará un doble control, el segundo con cacheo de todos los que quieran entrar.
En Estrasburgo (este), la zona de aficionados, en un parque, podrá dar cabida a 25 mil personas, y en Toulouse (sur) o en Lyon (este) a 20 mil cada una.
Si Francia gana, “el dispositivo se reforzará todavía más”, afirmó el ministro, que no quiso avanzar el plan para una hipotética celebración el lunes a la vuelta de los jugadores de Moscú, algo que anunciaría el presidente, Emmanuel Macron.
Antes de todo eso, la próxima noche y toda la jornada de mañana estarán marcadas por los actos de la Fiesta Nacional, que incluye cientos de bailes por toda la geografía francesa, fuegos artificiales y el tradicional desfile militar en la avenida de los Campos Elíseos de París.
Fuente: Excélsior