Ana Julia Méndez
Este 3 de Mayo, arquitectos, ingenieros, albañiles, cimbreros y chalanes, coinciden en que no tienen mucho que celebrar, pues consideran que no hay mucha fuente de trabajo en la capital oaxaqueña.
En algunas construcciones se puede observar que algunos empleados de la construcción laboran como cualquier día.
Aseguran que la crisis que existe en le país está cada vez peor y en el caso de la ciudad de oaxaca no hay mucho que celebrar por la falta de dinero. “Por el aumento de sectas religiosas, pocos dueños de construcciones acostumbran celebrar este día, ya no colocan la cruz de madera”.
Indicaron que cuando los “patrones” no son católicos, ellos se tienen que acatar y no pueden celebrar ni colocar alguna ofrenda a la construcción.
En otros casos, explicaron que hay dueños que no tienen suficiente dinero para organizar celebraciones.
Don Joaquín, quien lleva 4 décadas en la construcción, recuerda que hace años el 3 de mayo era una día de mucha fiesta. “Al alba se escuchaba los cohetes, y durante el día se podían oír la pirotecnia anunciando que era un día de fiesta, después al medio día, se realizaban una misa de acción de gracias, posteriormente se bendecía la cruz y se colocaba en la construcción”.
Dijo que con el paso de los años, esta costumbre se va perdiendo y muchos han dejado de celebrar. “El dinero es el factor más importante que ha detenido estas festividades, porque la crisis está dura”.