Los ocho militares acusados de participar en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa recibieron nuevas órdenes de aprehensión en su contra por el delito de delincuencia organizada.
Esta orden fue solicitada por la Fiscalía General de la República (FGR) luego de que los imputados habían obtenido el cambio de medida cautelar para enfrentar su proceso en libertad por el delito de desaparición forzada.
“Aparentemente, no está de acuerdo con nada porque la modificación de medida cautelar fue apegada totalmente a derecho en cumplimiento a una resolución de un tribunal colegiado y ahora misteriosamente el 25 de enero libra una nueva orden de aprehensión por un delito diverso”, afirmó José Sámano, abogado defensor de los elementos del Ejército.
Tras cumplir en el juzgado con su primera firma quincenal para cumplir con su medida cautelar la tarde de este jueves, los militares fueron detenidos al salir de las instalaciones del Poder Judicial federal en Toluca, Estado de México.
Los elementos castrenses imputados son Gustavo “R”, Omar “N”, Juan Andrés “F”, Ramiro “M”, Roberto “S”, Eloy “E”, Uri Yashiel “R” y Juan “S”.
“Esto es una chicanada, hemos estado defendiendo este proceso, creemos en la inocencia de nuestros defendidos, del personal militar y misteriosamente después de que fue modificada una resolución, una modificación de medida cautelar por un tribunal colegiado, ahora aparece una nueva orden de aprehensión por un delito diverso”, sentenció el litigante.
Los abogados que llevan la defensa de los militares consideran que se trata de una persecución por parte de la Fiscalía General de la República, porque a 10 años de los hechos de desaparición de los normalistas apenas se gira una orden por un nuevo delito.
No descartaron que se trate de un tema político dados los tiempos electorales y, afirmaron que esto no abona en la búsqueda de la verdad y la justicia.
“No conocemos el contexto de este nuevo proceso, pero sí, esto parece una persecución”, y añadió: “Se han intentado judicializar diversos asuntos (…) aquí no se está haciendo justicia para nadie ni para las víctimas, absolutamente estamos en total desacuerdo con estas decisiones, el conocimiento de esta causa data desde hace más de 10 años y, misteriosamente, cuando apegados a derecho se modifican las medidas cautelares de estos ocho militares, ahora les aparece una nueva orden de aprehensión por un delito diverso, pues suena muy raro no”, consideró el abogado defensor.
Luego de su detención, los militares fueron llevados a las instalaciones de la FGR en Toluca para una revisión médica y posteriormente llevados al Campo Militar 1-A en la Ciudad de México, en donde permanecen en una celda mientras se resuelve su situación legal.
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