El incendio que amenazaba con destruir este lunes el techo de la célebre catedral de Notre Dame de París levantaba una ola de conmoción y pena en el mundo.
La tragedia se convirtió rápidamente en el eje de atención en los medios informativos.
El presidente francés Emmanuel Macron, que se desplazó el lunes hasta el emblemático templo medieval, dijo que compartía el “dolor de toda una nación” y pensaba “en todos los católicos y todos los franceses”.
La canciller de Alemania, Ángela Merkel señaló que Notre Dame es “un símbolo de Francia y de nuestra cultura europea”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó el incendio como “horrible” y sugirió desplegar aviones cisterna para combatir las llamas.
Vía Twitter, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura publicó: “La Unesco sigue de cerca la situación y está junto a Francia para restaurar y salvaguardar este patrimonio inestimable”.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez escribió que “el incendio de Notre Dame es una catástrofe para Francia. Y lo es para España y para Europa. Las llamas arrasan 850 años de historia, de arquitectura, de pintura, de escultura”.
Fuente: La Jornada
