Ante las protestas de un grupo de talleristas y personal administrativo bajo el régimen de honorarios asimilados asalarios, el director general de la Casa de la Cultura Oaxaqueña, Guillermo García Manzano, manifestó que el personal inscrito no ha dejado de percibir un solo día su salario y no se ha suspendido a ningún trabajador. “La casa de la cultura permanecerá abierta, ni se cierra, ni se traslada y ni se traspasa”.